Empoderándonos Para Ser Mejores Investigadores por Sindicalización
La sindicalización es necesaria para que los estudiantes de posgrado puedan llevar a cabo sus labores esenciales de investigación en el MIT
por Lucy Hu, Madeleine Sutherland, Serita Sulzman, Maddie Dery, Sneha Kabaria, Yadav Gowda, Bridget Begg, Nishad Gothoskar y Belinda Li
Traducido por Joseph Maalouf de un editorial publicado en The Tech
Más de 5,000 trabajadores de posgrado actúan como el motor de investigaciones del MIT, constituyendo aproximadamente 65% del total de investigadores. Nosotros planeamos meticulosamente experimentos que nadie ha hecho en el mundo, los repetimos hasta que los resultados son científicamente correctos y redactamos textos que ultimadamente contribuyen al cuerpo de conocimiento del mundo. Como los trabajadores más cercanos a nuestro trabajo, nosotros somos los expertos en cuanto a los recursos que necesitamos en nuestro lugar de trabajo para producir las innovaciones y los descubrimientos de primera clase del MIT con éxito. La mayoría de los trabajadores de posgrado se han registrado en el sindicato porque nosotros creemos firmemente que merecemos una voz en nuestro lugar de trabajo – y sindicalizarnos es la única manera de garantizarnos el poder de negociar de una forma legalmente viable para obtener las herramientas que necesitamos con el objetivo de ser investigadores sobresalientes.
A través de miles de conversaciones con nuestros compañeros de trabajo, se ha vuelto claro que el MIT no nos provee con los recursos suficientes para producir nuestras mejores investigaciones eficientemente. Muchos de nosotros no tenemos ni el equipo ni los materiales que requerimos, tenemos dificultades para acceder a infraestructura de investigación centralizada, debido a la falta de personal o de rotación de personal (por ejemplo, empleados administrativos o empleados de instalaciones básicas), gastamos demasiado tiempo reparando equipo obsoleto y además tenemos preocupaciones sobre la seguridad del laboratorio que no han sido atendidas. Nos han frustrado cuando hemos hablado de estos asuntos individualmente y hemos sido ignorados o despedidos. Incluso cuando nuestros asesores han intentado ayudarnos, los problemas sólo parecen subir uno o dos peldaños en la jerarquía de la burocracia del MIT, siguiendo sin tener solución. Los administradores aseguran que no está en su poder resolver asuntos sobre el personal o las instalaciones. Al unirnos frente a estos problemas que incluyen laboratorios, departamentos y facultades, nuestro sindicato puede ampliar nuestra voz colectiva para crear una mejora tangible con relación a estos asuntos del lugar de trabajo.
Actualmente, los trabajadores de posgrado del MIT no tienen una descripción de trabajo bien definida, dejando los límites de nuestras responsabilidades muy ambiguos. Como consecuencia, cuando hay una falta inapropiada de inversiones en personal de apoyo e infraestructura de investigación, nos vemos forzados a cubrir el puesto. Las investigaciones de por sí involucran una carga de trabajo bastante diversa: diseñar y realizar experimentos, fabricar materiales y dispositivos, analizar datos y caracterizar sistemas, generar cifras y redactar artículos o informes. Cuando también tenemos que hacer tareas administrativas o de mantenimiento, nuestra capacidad de hacer buenas investigaciones es perjudicada.
Aunque muchas universidades, incluyendo el MIT, afirman que los estudiantes de posgrado no son trabajadores, muchos investigadores de posgrado gastan una abrumadora parte de su tiempo – o hasta la mayoría – haciendo tareas que no les permiten avanzar directamente en sus investigaciones o en su educación. Para las áreas de ciencia e ingeniería, cuando un laboratorio no tiene un director o apoyo administrativo constante, los investigadores de posgrado a menudo están saturados de tareas como:
Ordenar equipo y suministros (entregar órdenes de compras, reunirse con representantes de ventas, hacer borradores de propuestas presupuestarias).
Investigar, gestionar, y mantener equipo, contratos de servicio, y relaciones con vendedores.
Reparar máquinas descompuestas solamente porque son demasiado viejas para ser revisadas o porque se están usando para actividades para las cuales no estaban diseñadas.
Proporcionar ayuda administrativa para clases de las que no somos profesores auxiliares (haciendo copias, manteniendo Canvas, dando clases cuando los profesores tienen dificultades con sus calendarios).
Planear reuniones de grupo o agendas de visitas.
Elaborar nuestros propios reactivos químicos o equipos de prueba.
Trabajar en los proyectos preferidos de nuestro director de tesis en vez de trabajar en nuestras propias investigaciones de tesis.
Redactar los subsidios de nuestro director de tesis e informes sin su ayuda o contribuciones.
Servir como una empresa de mudanzas personal cuando nuestro director de tesis hace un cambio de instalaciones.
Cuidar los hijos o mascotas de nuestro director de tesis.
Para los investigadores de posgrado, rechazar estas tareas complica las relaciones con nuestros asesores. Hacemos este trabajo no remunerado porque tememos por nuestro financiamiento, plazo de tiempo para graduación y elegibilidad para una recomendación laboral. Con un sindicato, podremos definir descripciones laborales básicas para los trabajadores de posgrado, y lo más importante es que tendremos el poder de asegurar que nuestro tiempo se ocupa para avanzar investigaciones en vez de reparar equipo descompuesto. Reconociendo la heterogeneidad de las investigaciones a través del Instituto, podemos establecer y reafirmar límites claros sobre qué es y qué no es un ser un trabajador de posgrado.
El dogma de descentralización del MIT insiste en que las necesidades de cada departamento, laboratorio o centro son tan únicas que no pueden adoptar ninguna de las mismas políticas y prácticas con éxito. Pero en realidad, a través de todos los departamentos, compartimos algunos problemas comunes que nos impiden hacer investigaciones de una forma exitosa y sostenible. Por ejemplo:
Descripciones y expectativas de trabajo que no son claras.
Protección inadecuada de nuestras vacaciones del Instituto, días de incapacidad, y vacaciones personales.
Lineamientos poco claros para colaborar en investigaciones dentro de grupos o instituciones.
Problemas de salud física o mental.
Mentoría inconsistente e inadecuada.
Falta de un espacio adecuado para trabajar.
Por supuesto, aún hay asuntos que son propios de cada departamento o área. Algunos departamentos no garantizan financiamiento para los estudiantes de posgrado por todo el año, otros presentan brechas en la tasa de deserción y discrepancias en el índice de aprobados del examen preliminar de aptitud entre géneros y minorías poco representadas. Los investigadores de humanidades y ciencias sociales tienen programas de financiamiento con plazos limitados, con pocas oportunidades para extensiones, o becas anuales de investigación de tesis. Esto resulta en una situación más precaria para los investigadores, en particular cuando sufren retrasos en sus investigaciones o cuando el mercado laboral empeora, como ha ocurrido durante la pandemia.
El Sindicato de estudiantes de posgrado del MIT (GSU, por sus siglas en inglés) está compuesto de la mayoría de los trabajadores de cada departamento para capturar la diversidad de experiencias cuando se desarrollan objetivos de negociación. Asegurar una representación nos dará la oportunidad de negociar un contrato que satisfaga las necesidades de cada departamento y de cada trabajador.
Otros sindicatos de trabajadores de posgrado han obtenido reglas de contratación que garantizan acceso a equipo, instalaciones, y apoyo institucional que los trabajadores de posgrado necesitan considerablemente para hacer sus labores (hay que ver, por ejemplo, la Universidad de Michigan, la Universidad de Connecticut, y el sistema de la Universidad de California). Los contratos también protegen a los trabajadores de posgrado del exceso de trabajo y agotamiento al establecer normas claras para las horas laborales y vacaciones – al mismo tiempo que permiten a los trabajadores de posgrado ocupar más de las horas especificadas para trabajar en sus propias investigaciones y objetivos educacionales cuando ellos así lo decidan. Los contratos sindicales empoderan a trabajadores de posgrado para que gestionemos nuestro tiempo de una forma saludable, balanceada, y constructiva.
El magisterio se sindicaliza para reducir la cantidad de alumnos en sus clases con el fin de enfocarse en brindar la mejor educación posible a sus estudiantes. Los profesionales de enfermería se sindicalizan para luchar contra la falta de personal y así poder brindar cuidados de alta calidad a sus pacientes. Nosotros nos sindicalizamos para que podamos enfocarnos en hacer investigaciones de primera clase. Cuando cada alumno del MIT – cada ingeniero eléctrico, historiadora, químico, arquitecto, bióloga evolutiva – esté empoderado para presentarse plenamente a su trabajo, sólo entonces alcanzaremos nuestro verdadero potencial. Únete hoy a nosotros por firmar tu carta del sindicato.